(1952, Medellín, Colombia) Es uno de los primeros pintores colombianos cuya obra, ha obtenido el reconocimiento mundial.
Empezó a trabajar como dibujante desde muy joven, en el suplemento literario del periódico "El Colombiano", cuando tenia apenas 16 años y todavía empezaba el colegio.
En la década de los 50 viajó por primera vez a Europa (Madrid y París) y regresó al país a mostrar sus trabajos. No fue comprendido y viajó entonces a México, donde conoció las obras de los muralistas mexicanos Diego Rivera, David A. Siqueiros y José Clemente Orozco. En otro de sus regresos a colombia sus pinturas fueron apreciadas por la critica de arte Martha Traba, la única que valoró la importancia de su obra. Por esos años Botero ya era un pintor con estilo propio, lo que fue confirmado cuando vivía en Estados Unidos, y el museo de arte de Nueva York le compró un cuadro llamado "Monalisa a los doce años". A partir de ese momento su fama no ha dejado de crecer en el mundo.
Es uno de los pocos artistas del siglo cuyas esculturas han sido expuestas en los Campos Elíseos de París y en Parque Central de Nueva York. La obra de Botero se caracteriza por su ironía, la cual es expresada a través de la "gordura", también por la eshuberancia de sus figuras y por ser un retrato de la idiosincrasia del pueblo del pueblo colombiano y latinoamericano. Los críticos dicen que Botero es el García Márquez de la Pintura.
Su ultimo trabajo pictórico tiene como tema la tauromaquia. Su vida discurre entre París, New York y Madrid, ciudades donde tiene talleres y realizó sus obras.
Empezó a trabajar como dibujante desde muy joven, en el suplemento literario del periódico "El Colombiano", cuando tenia apenas 16 años y todavía empezaba el colegio.
En la década de los 50 viajó por primera vez a Europa (Madrid y París) y regresó al país a mostrar sus trabajos. No fue comprendido y viajó entonces a México, donde conoció las obras de los muralistas mexicanos Diego Rivera, David A. Siqueiros y José Clemente Orozco. En otro de sus regresos a colombia sus pinturas fueron apreciadas por la critica de arte Martha Traba, la única que valoró la importancia de su obra. Por esos años Botero ya era un pintor con estilo propio, lo que fue confirmado cuando vivía en Estados Unidos, y el museo de arte de Nueva York le compró un cuadro llamado "Monalisa a los doce años". A partir de ese momento su fama no ha dejado de crecer en el mundo.
Es uno de los pocos artistas del siglo cuyas esculturas han sido expuestas en los Campos Elíseos de París y en Parque Central de Nueva York. La obra de Botero se caracteriza por su ironía, la cual es expresada a través de la "gordura", también por la eshuberancia de sus figuras y por ser un retrato de la idiosincrasia del pueblo del pueblo colombiano y latinoamericano. Los críticos dicen que Botero es el García Márquez de la Pintura.
Su ultimo trabajo pictórico tiene como tema la tauromaquia. Su vida discurre entre París, New York y Madrid, ciudades donde tiene talleres y realizó sus obras.
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